En la oscuridad de la noche

De noche no hay nada mejor que caminar, en especial ante un clima tan romántico como una ciudad bajo la luna llena; el mp3 le daba la melodía a mis pasos, lástima que había mucha gente para andar cantando lo que escuchaba y por eso, yo preferí moverme por callejas hasta alguna zona con menor densidad de gente... ¡Son las 24 horas! ¡¿cuánta más gente me encontraría?! Por suerte no más, a partir de las tres cuadras llegué al fin a un sendero recto donde podía comenzar a vocalizar aguna tonada...

-¡Miren ésto!- escuché atrás mío a un sujeto que le estaba hablando a sus camaradas... -¡es una hermosa nena caminando sola adelante nuestro!
El maldito hablaba de mí, aceleré el paso y le bajé en ello el volumen al mp3 para saber qué tramaban los pandilleros.

Para mi mala fortuna ellos cuatro obstruyeron mi paso, y con posturas agresivas me iban acorralando...
-¿Por qué te nos vas nena?
-¿A quién llamas 'nena'? ¿no puedes ver bien en la oscuridad?- sarcástico le contesto al charlatán, y en ello los amigos de él se le burlan por la confusión...
-¡Maldita sea...! ¡...no eres mujer!
-Un aplauso, lo descubrió- añadí.

Me empujó al suelo a lo que sus 'seguidores' le comenzaron a incitar para pelea gritando 'pelea' con énfasis; chiflaban y gritaban para que comenzara la golpiza, si yo respondía y era demasiado buen rival... los otros también se meterían a golpearme. Pocas opciones se me ocurrían si no fuere a correr.

camino por las calles obscuras de la ciudad, portando una gran capa negra la cual cual cubria por completo mi cuerpo y un gorro que cubria mi rostro, escucho a lo lejos a personas gritando algo, al no entender muy bien fui hacia donde probenia el sonido, al llegar encuentro a varios chicos gritando "pelea", y a un chico en el suelo, le obcerve por un momento, podia atacar a los demas atacarles implicaria acecinarlos, despues de pensarlo un rato me hacerco mas al chico extendiendo mi mano hacia el para ayudrle a levantarce

-Vaya, gracias... pero creo que no es seguro que hayas venido quién seas...
Le dije a la chica que había llegado, no me molesté en mirarla bien, pues le hablé tanteando qué harían los malditos.

-Oh, miren ésto muchachos ¡El homosexual tiene novia! al fin una chica, ayúdenme a disfrutar ésto
Ellos la habían visto acercarse sorprendidos, pero ya habiendome ella ayudado, no lo dudarían más, el que parecía ser el manda-más allí motivó a los otros cinco a agredirnos a mí y a ella.

-¡Yo soy EL OSCURO!
Grité con una voz gutural muy grave mientras alzando mis manos agrupé agua del rocío de la noche para formar un charco el cual rápido lo coloqué debajo del siguiente paso del busca pleitos... él cayó duro al piso desequilibrado.

-¡Es un mutante!
Se asustaron los compañeros de él. Pero no duró mucho el susto que se convirtió en odio personal:

-Yo sabía que era un rarito de lo peor, ¡mátenlo!
-Corre señorita o te matarán a tí también, son anti-mutantes además de delincuentes

no creo que me puedan matar
dije con voz baja mientras extendia mi brazo izquierdo en direccion donde se encontraban aquellos humanos, las venas de mis manos comenzaron a alargarce vastantes atravesando mi piel hasta llegar al cuello de el que parecia ser el lider, enrrollando con mis venas su cuello apretandolo cada vez mas